1 Busca la dirección a la que quieres llegar.
Un navegador GPS te va a calcular la ruta más rápida que
tienes que seguir para llegar a un punto 'B' desde un punto 'A'. Lo único que
tienes que hacer es introducir la dirección desde la que partes y a la que vas.
2 Sugerencia de nombres de calles.
Esta herramienta tiene almacenados en su memoria miles y
miles de calles, avenidas y paseos. Cuando introduzcas una dirección la máquina
te sugerirá de forma automática varios nombres.
3 Escucha las direcciones.
Desviar la mirada de la carretera es muy peligroso, razón
por la que estas máquinas le dicen al conductor el camino que tiene que seguir:
"En 50 m. gire a la derecha"; "en la siguiente rotonda tome la
tercera salida".
4 No pasa nada si te desvías.
El GPS calculará la ruta más rápida para llegar a tu
destino. Pero si te desvías del trayecto marcado no te preocupes, elaborará
automáticamente un nuevo camino basándose en tu nueva posición.
5 Prepara el GPS antes de empezar la conducción.
Nunca manipules esta herramienta mientras conduces, es muy
peligroso y puede costarte varios puntos del carné de conducir.
6 ¿Quieres más información?
Si quieres saber más sobre estos dispositivos entra en la
sección de 'GPS'.
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